“A José Antonio Labordeta”
¿Qué hay de nuevo queridos tranviarios? Aquí estamos, después de unas vacaciones, dispuestos a empezar una nueva temporada, la novena, y no es que nos vayamos a poner a rezar, es que va para nueve años que este Tranvía realizó su primer trayecto por las ondas de nuestra querida Radio Villalba, y para empezar este nuevo curso hemos elegido hacer un merecido homenaje a José Antonio Labordeta, cantante, escritor diputado,.. que nos dejaba hace escasamente dos semanas.
[caption id="attachment_517" align="aligncenter" width="300" caption="J. A. Labordeta"][/caption]
Un tímido osado y comprometido
Fragmentos del artículo escrito en 10lineas.com por A N T O N I O P É R E Z L A S H E R A S
Si existe un personaje que pueda considerarse emblema de la conciencia político-social aragonesa ése es, sin lugar a dudas, José Antonio Labordeta. Con su voz a cuestas, Labordeta ha hecho más por la difusión de lo aragonés fuera y dentro de nuestras fronteras que muchos y muy sesudas monografías sobre cualquier aspecto de nuestra cultura.
Resulta curioso observar que, si como poeta, Labordeta ha tenido que vivir en numerosas ocasiones a la sombra de su hermano, Miguel, como persona pública ha sido él quien ha solapado la oronda figura del mayor de los Labordeta. Su imagen ha sido símbolo de todas las causas perdidas -de "todas las banderas rotas", como dice en una canción-, siempre fue un reivindicador de todas las injusticias. Profesor de Historia, político, poeta, novelista, editor, articulista, memorialista, particular cronista del acontecer diario, desautomatizador de rutinas aburguesadas, actor, realizador de televisión lo que más impresiona de él era su persona.
José Antonio Labordeta Subías nació el 10 de marzo de 1935 en el viejo caserón de la calle del Buen Pastor, número 1, donde su familia regentaba el colegio con internado Santo Tomás de Aquino. Sus primeras imágenes y los primeros recuerdos tienen como referente más inmediato la guerra civil: la preocupación, el miedo, los familiares huidos. Siempre estuvo donde había que estar, allí donde se ha ido creando la conciencia aragonesista de izquierdas; allí donde había que levantar la utopía y la esperanza, aun a sabiendas, en ocasiones "que nada es la respuesta", como diría su hermano Miguel; allí donde la amarga soledad debía convertirse en acto solidario.
Aguantó modas y modos y modales más o menos intempestivos, alcaldes y pueblos, renovó canciones para seguir cantando las mismas, las que todos se sabían, porque el canto es un ejercicio colectivo, catártico, que precisa de un sacerdote que realice la liturgia, trabajó como realizador de televisión con los excelentes reportajes que son Un país en la mochila, donde paisajes y hombres se funden en el misterio de cada atardecer, aguantó carros y carretas hasta verse -todavía sin creérselo demasiado- en el Congreso de los Diputados de la calle San Jerónimo de la Villa y Corte como una de las señorías más requeridas y queridas, solicitadas y solícitas.
Labordeta nos dejaba en la madrugada del pasado 19 de septiembre, su canción El canto a la libertad se ha convertido en el himno de Aragón.
"Nací en Zaragoza en el año 1935, en el seno de una familia pequeño-burguesa e ilustrada. En mi casa igual se leía a Virgilio que a Lautremont. Tuve una infancia secretuda y llena de escondites donde guardaba mis ansias de ser un hombre. No fui buen estudiante pero sí buen amigo de mis amigos. De mi hermano Miguel heredé el ansia de escribir y de mi hermano Manuel la de cantar. ¡Él sí que cantaba bien!
De mi padre heredé los silencios y de mi madre la desconfianza hacia el ser humano.
Escribí versos, me reí con mis amigos y el franquismo me puso la cara seria hasta tal punto que, durante unos años, olvidé el reírme. Tan tarde empecé que ahora mi risa es un rictus un tanto conejil.
Un día me puse a cantar, pero nunca me lo tomé muy en serio porque estaba convencido de que ése no era mi oficio.
Oficié en Andalán con unos colegas inconscientes y seguí convencido de que lo mío era pasear por las mañanas en la zaragozana gusanera.
A mis veintitrés años vi por primera vez el mar, desde lo alto del Campamento de Milicias Universitarias de Castillejos. Desde allí descubrí el cabo de Salou. Luego vi el Cantábrico y entendí a los poetas ingleses.
Ahora sólo me produce intranquilidad el fax. Lo demás, a mi edad, ya casi lo tengo todo controlado, menos la vida, naturalmente"
J. A. Labordeta
En nuestro apartado de cine recordaremos al director de cine Arthur Penn, realizador de películas como Bonnie & Clyde o La jauría humana entre otras y también al actor Tony Curtis fallecido ayer a la edad de 85 años.
Todo esto regado como siempre con las lecturas y la música que nos traen, como todos los viernes, Ali Ciente y YoNi LoKato.
Esperamos disfrutéis en esta novena temporada, ¡sed felices!